La vida me radica en dos. Un lado abarrotado de contento, el otro sumido en la melancolía. Intento encontrar un armonía, pero las corrientes me llevan hacia el profundo. No sé si alguna vez podré sobrevivir a esta fragmentación que me consume. Tal vez sea irrealizable encontrar un camino directo a través de este desorden. Pedazos de un pris